Omari Musa: 57 años construyendo el Partido Socialista de los Trabajadores

Por Arlene Rubinstein
y Susan Lamont
28 de abril de 2025
Omari Musa, candidato del Partido Socialista de los Trabajadores al Congreso por Florida en 2008, explica su programa. Ingresó al PST en 1969 y fue su candidato en 19 ocasiones.
Militante/Bernie SenterOmari Musa, candidato del Partido Socialista de los Trabajadores al Congreso por Florida en 2008, explica su programa. Ingresó al PST en 1969 y fue su candidato en 19 ocasiones.

WASHINGTON — El 22 de marzo se celebró un evento aquí para celebrar la vida de Omari Musa, un cuadro veterano que dedicó 57 años a la construcción del movimiento comunista en Estados Unidos e internacionalmente. Fue organizado por la rama del Partido Socialista de los Trabajadores en Washington.

Musa, elegido al Comité Nacional del PST en sus convenciones durante 25 años, falleció a la edad de 80 años el 22 de febrero.

Musa se integró a la Alianza de la Juventud Socialista (AJS) en 1968 en Ann Arbor, Michigan, donde era un estudiante de posgrado en Estudios de Asia Oriental, y al Partido Socialista de los Trabajadores un año después en el Área de la Bahía de San Francisco. Se negó a aceptar las brutales injusticias de la explotación y la opresión capitalistas y fue transformado por la histórica batalla liderada por trabajadores negros que aplastó la segregación racial de Jim Crow. Durante su estancia en Michigan, viajó con frecuencia a Detroit para colaborar con la AJS y el partido. Fue testigo de la creciente confianza y combatividad de los trabajadores negros y el impacto que esto tuvo en los poderosos sindicatos industriales en la región.

Se dedicó de lleno a construir el movimiento de masas contra la guerra de los gobernantes capitalistas de Estados Unidos que fracasó en aplastar la Revolución Vietnamita. Se identificó con Malcolm X y aprendió de los trabajadores cubanos liderados por Fidel Castro que tomaron el poder estatal en 1959 y logaron detener los intentos del gobierno imperialista en Washington para destruirlos.

Las presentaciones en el evento sobre la historia del partido y las contribuciones políticas de Musa a lo largo de décadas fueron una recomendación para los luchadores de hoy a seguir su ejemplo. Construir un partido proletario revolucionario lo suficientemente fuerte y firme políticamente para liderar a los trabajadores a hacer una revolución socialista en Estados Unidos, como parte de una extensión de la revolución socialista mundial. Comprendió que esa era la única manera de detener las convulsiones sociales y las guerras actuales del imperialismo que nos están conduciendo al fascismo y a una impensable Tercera Guerra Mundial.

Omari Musa habla en coloquio internacional Nicolás Guillén, titulado “Vine en un barco negrero”, La Habana, abril de 2012. Más de 100 personas debatieron sobre el legado de las luchas de los negros en la centenaria lucha por la independencia y la revolución socialista en Cuba.
Militante/Róger CaleroOmari Musa habla en coloquio internacional Nicolás Guillén, titulado “Vine en un barco negrero”, La Habana, abril de 2012. Más de 100 personas debatieron sobre el legado de las luchas de los negros en la centenaria lucha por la independencia y la revolución socialista en Cuba.

El homenaje fue presidido por Arlene Rubinstein, organizadora de la rama del PST en Washington, quien leyó varios de los mensajes enviados y dio la bienvenida a los más de 80 participantes: miembros y partidarios de su partido, personas con quienes trabajó y luchó en el área de Washington y a través del país, y jóvenes interesados en aprender más sobre Musa y sobre el PST.

La hermana de Musa, Sharon Worthy, vino de Nueva Orleans, donde ambos crecieron en los tiempos de la segregación racial de Jim Crow. Entre los presentes se encontraban miembros de la Coalición Metropolitana de Washington D.C. en Solidaridad con la Revolución Cubana, que Musa ayudó a fundar. Yasser Ibarra, primer secretario de la Embajada de Cuba, asistió y trajo un mensaje de agradecimiento por la labor de Omari en defensa de la Revolución Cubana.

Una exposición de cuatro paneles, preparada por la rama del partido en Washington, presentó con fotos y textos la labor del partido en la lucha de clases a lo largo de las décadas de vida de Musa y sus contribuciones en la dirección de ese trabajo.

Entre los oradores se encontraban James Harris y Samir Hazboun, dirigentes de la rama del PST en esta ciudad, de la cual Musa fue miembro durante los últimos 15 años de su vida; Dave Prince, miembro por muchos años del Comité Nacional del partido, quien moderó el evento con Rubinstein; y Mary-Alice Waters, quien habló en nombre de la dirección central del Partido Socialista de los Trabajadores.

Ellos describieron cómo Musa se hizo comunista, marxista y proletario internacionalista.

Los oradores y mensajes recibidos de todo el país y el mundo describieron la cálida personalidad de Musa, su pasión por el jazz y su sentido del humor siempre alerta, que frecuentemente ponía a buen uso en su labor política.

Fue un evento que vio al pasado para mirar hacia adelante, como recomendaba Musa: “Únete al Partido Socialista de los Trabajadores; no hay nada mejor”.

Se unió al PST en 1969

“Omari se incorporó al partido en 1969 en el Área de la Bahía y fue candidato del PST a gobernador de California en 1970”, dijo Rubinstein al inicio del evento. “Fue candidato del PST 19 veces en numerosos estados, y aquí en Washington”.

“Para Omari, popularizar el programa del partido fue una consecuencia natural de su actividad. De su muy usada biblioteca, estudió, leyó y releyó clásicos marxistas y libros de dirigentes del partido. Encima de la pila de libros estaba Malcolm X, la liberación de los negros y el camino al poder obrero, sobre la importancia de la lucha por la liberación de los negros en la lucha de clases en Estados Unidos, y Malcolm X como dirigente internacional de la clase trabajadora. Este era su libro”.

“Cuando Omari se integró al partido, se convirtió en un ciudadano del tiempo, pero siempre en el presente, en lo que hay que hacer, hoy”, dijo Prince. Vivimos en uno de los grandes períodos de transición de la historia de la humanidad. Nos enfrentamos a la realidad de un mundo capitalista desolador. Pero para los trabajadores, es un futuro de esperanza, la perspectiva de arrebatar el poder estatal de manos de la clase capitalista y comenzar a reconstruir la sociedad sobre nuevas bases.

Omari se educó en la continuidad comunista, desde Marx y Engels, pasando por la Revolución Rusa liderada por Lenin y la lucha dirigida por León Trotsky contra el estalinismo, el frentepopulismo y la colaboración de clases, una batalla que culminó en vísperas de la Segunda Guerra Mundial en una contienda política contra una minoría no proletaria en el PST. Esa es la corriente política que el PST representa hoy, que está construyendo un partido proletario tanto en su programa como en su composición.

Omari Musa hace campaña en pueblos mineros de carbón en Virginia del Oeste, 2013. Donna Moore (centro), cuyo hijo era minero en la mina Patriot Coal, y su madre, disfrutaron de una larga conversación con Musa, y compraron una suscripción al Militante para su casa en Racine.
Militante/Janet PostOmari Musa hace campaña en pueblos mineros de carbón en Virginia del Oeste, 2013. Donna Moore (centro), cuyo hijo era minero en la mina Patriot Coal, y su madre, disfrutaron de una larga conversación con Musa, y compraron una suscripción al Militante   para su casa en Racine.

“Esas corrientes —comunistas, estalinistas y socialdemócratas”, dijo Prince siguen siendo las principales corrientes políticas en pugna hoy en día.

“Omari comprendió que el objetivo de la educación en el partido es formar políticos revolucionarios capaces, no simplemente teóricos”, añadió Prince.

Muchos de los mensajes describían a Musa como un popularizador de la política revolucionaria, que frecuentemente intervenía de forma eficaz y resuelta en debates sobre un curso de acción.

Norton Sandler, dirigente del PST en Los Angeles, escribió: “El dio un ejemplo digno de emular al aplicar una política de principios, a la vez que fue capaz de trabajar con dirigentes sindicales, con opositores provenientes de corrientes estalinistas y nacionalistas que defendían la Revolución Cubana, en el Partido Político Nacional Negro Independiente y en otros trabajos de masas”.

Viraje a los sindicatos industriales

Musa también ayudó a dirigir el viraje del partido hacia los sindicatos industriales a partir de 1978. Los miembros del partido obtuvieron empleos en minas de carbón, talleres textiles, plantas automotrices y otras industrias sindicalizadas. Esto fue posible debido a los cambios de conciencia en la clase trabajadora y su creciente combatividad, influidas por los acontecimientos mundiales.

“La batalla librada en 1979 por 18 mil trabajadores de astilleros en Newport News, Virginia, por el reconocimiento del Local 8888 del sindicato de trabajadores del acero USWA y por un convenio sindical, fue un ejemplo de estos cambios”, dijo Harris, “trabajadores negros y caucásicos, dirigidos por una vanguardia de trabajadores negros, se unieron para derrotar a un patrón que esperaba usar las divisiones raciales para derrotar al sindicato. Omari fue miembro de la rama del PST que fue organizada allí en ese entonces.

“Cualquier persona que conoció a Omari, aunque fuera por poco tiempo, habrá escuchado la historia sobre un trabajador caucásico del astillero que arrancó de su chamarra un parche con la bandera de la Confederación después de que los miembros del sindicato repelieran un gran ataque de la policía contra la sede de la huelga y reestablecieran su línea de piquetes. ‘Ya no voy a portar esto más’.

“Es fácil olvidar o malinterpretar la importancia de esto”, dijo Harris. “Ahora, cuando uno ve una línea de piquetes con trabajadores negros y caucásicos unidos contra los patrones, ni siquiera llama la atención. Pero fue necesario librar una larga y ardua lucha, liderada por trabajadores negros, para que esto fuera posible”.

“Omari ayudó a reclutarme al partido y a la clase trabajadora”, dijo Samir Hazboun, quien se unió al PST en 2018. “No hay forma de agradecer eso”.

Hazboun habló sobre el impacto que tuvo la descripción de Omari de la lucha en Newport News en sus compañeros de trabajo en la cafetería donde trabaja. “Mis compañeros de trabajo en la mesa del almuerzo dejaron sus teléfonos celulares y prestaron mucha atención cuando describí esa batalla”, dijo Hazboun. Dos de sus compañeros de trabajo se interesaron en saber más y asistieron al homenaje.

‘Malcolm X, la liberación de los negros y el camino al poder obrero’

“No hay mejor homenaje a Omari y al partido que ayudó a construir por más de medio siglo que la introducción a Malcolm X, la liberación de los negros y el camino al poder obrero, de Jack Barnes, secretario nacional del Partido Socialista de los Trabajadores”, dijo Mary-Alice Waters. Al concluir sus palabras, leyó los últimos párrafos de esa introducción. (Vea el extracto adjunto).

“Omari ampliaba, profundizaba y mejoraba continuamente su inquebrantable confianza en la clase trabajadora y en su capacidad de liderar una revolución socialista, transformándonos en el proceso”, dijo Waters. “Tenía una profunda comprensión, basada en sus propias experiencias, de que la lucha por la liberación de los negros es parte inseparable del camino hacia el poder obrero. Sabía que la clase trabajadora en Estados Unidos es actualmente mucho más fuerte como resultado de las batallas que derribaron la discriminación racial de Jim Crow.

“Pensando en las contribuciones de Omari como dirigente, me acordé de un poema del dramaturgo alemán Bertolt Brecht, ‘Elogio de los luchadores’, que luego se hizo famoso con la canción del trovador cubano Silvio Rodríguez”, dijo Waters. “El poema dice que las luchas avanzan gracias a las contribuciones de muchos, pero hay los que luchan toda la vida, y ‘esos son los imprescindibles’.

“Omari verdaderamente se puede contar entre los imprescindibles”, dijo Waters.

Ruptura con el estalinismo

“La ruptura de Omari con el estalinismo fue una parte importante y necesaria de su desarrollo político en el partido”, dijo Waters. “Como muchos en aquel entonces, inicialmente se sintió atraído por la Revolución China y su aura de representar el levantamiento de los pueblos del ‘Tercer Mundo’ oprimidos por el imperialismo.

“Omari recibió una verdadera educación sobre el carácter reaccionario del maoísmo cuando se mudó al Área de la Bahía en 1969, donde varias universidades fueron escenario de encarnizadas batallas entre grupos maoístas decididos a tomar físicamente el control de los departamentos de Estudios del Tercer Mundo que se estaban estableciendo, y otros estudiantes y profesores decididos a impedirlo”, dijo.

“Los grupos maoístas estaban dominados por matones violentos, inspirados por la llamada ‘Gran Revolución Cultural Proletaria’ que se desarrollaba en China”. El PST era el único partido que podía explicar el carácter estalinista de la dirección maoísta y sus acólitos en todo el mundo, cuya política violenta, ultraizquierdista y antiobrera influyó al Partido de las Panteras Negras, los Weathermen, un sector del movimiento contra la guerra de Vietnam y otros que se alejaban de la clase trabajadora.

Musa habla en convención de la Alianza de la Juventud Socialista en la Universidad de Illinois en Chicago, 1968. Fue delegado de la sección de la AJS en Ann Arbor, Michigan
Musa habla en convención de la Alianza de la Juventud Socialista en la Universidad de Illinois en Chicago, 1968. Fue delegado de la sección de la AJS en Ann Arbor, Michigan

“Sin comprender la ruptura de Omari con el maoísmo, no se puede apreciar plenamente su internacionalismo proletario”, dijo Waters, “y cómo aprendió que no puede haber un rumbo revolucionario que no comience con el mundo y la clase trabajadora. Esto Omari lo llevaba en la sangre”.

Omari se sentía cómodo trabajando con compañeros de trabajo de todas las razas, colores y orígenes nacionales, dijo. Citó uno de los mensajes enviados a la reunión sobre cómo Omari “se sentaba en cualquier mesa de la sala de descanso de una planta empacadora de carne con una gran cantidad de trabajadores inmigrantes de todo el mundo, sonreía y saludaba en cualquier idioma que se hablara: chino, español, vietnamita, portugués, inglés o cualquier otro. Con más de 1.80 metros de alto, hacía que todos, incluidas sus compañeras de trabajo, se sintieran cómodos”.

“En los últimos 25 años, Omari estuvo profundamente involucrado en dirigir el trabajo del PST en defensa de la Revolución Cubana, primero en Miami y luego en Washington”, dijo Waters. Con gusto aceptaba tareas del partido que a menudo lo llevaban a Cuba, Venezuela, Líbano y otros países del mundo para participar en conferencias, brigadas, reuniones sindicales y otros eventos de solidaridad con Cuba.

En 2008, por invitación de Víctor Dreke, entonces embajador de Cuba en Guinea Ecuatorial, Musa participó en un viaje a ese país. En un mensaje dirigido al evento, Dreke y la doctora Ana Morales recordaron esa visita, destacando la “capacidad de Musa de absorber todo lo que ocurría allí”.

El homenaje concluyó con una colección para el Partido Socialista de los Trabajadores que resultó en 5,018 dólares en contribuciones. Rubinstein agradeció a los partidarios del Partido Socialista de los Trabajadores en Washington por la deliciosa comida que prepararon y al Centro Cívico de Silver Spring por recibir al partido en su local.

Los participantes se quedaron más de una hora después del evento para conversar, seguir leyendo las exposiciones y el libro de mensajes, y escuchar buen jazz.