MANCHESTER, Inglaterra — “La indignación de los trabajadores se ha intensificado desde el colapso financiero de 2007-2008, con la caída de los salarios reales, la creciente inseguridad laboral y la incertidumbre sobre el futuro en un mundo de crisis, conflictos y guerras”, dijo Jonathan Silberman, dirigente de la Liga Comunista, en su informe sobre la resolución política que fue adoptada por el Décimo Congreso Constitucional de la Liga celebrado aquí del 16 al 17 de diciembre. “Hay un profundo deseo por un cambio dentro de la clase trabajadora. Millones de trabajadores están dispuestos a discutir sobre política con comunistas”.
La base de nuestro trabajo es ir de puerta en puerta en barrios obreros para discutir un programa comunista y sus perspectivas, dice la resolución. “Realizamos este trabajo como miembros de la Liga Comunista que están forjando un partido proletario. A través de este trabajo, buscamos establecer relaciones con trabajadores y sentar las bases para participar conjuntamente en la actividad política y el reclutamiento”, dice la resolución. “Un aspecto central de esto y una medida para evaluar nuestros resultados, son las ventas de libros sobre política comunista y suscripciones al Militante”.
“En este congreso, estamos proponiendo un paso adicional para profundizar nuestro trabajo en nuestra clase para forjar el partido”, dijo Silberman. “Establecer fracciones sindicales en los centros donde laboran los miembros de la Liga: reuniéndonos con compañeros de trabajo para conversar relajadamente fuera del trabajo, reuniéndonos con sus familiares y amigos, organizar reuniones en las casas e ir de puerta en puerta en áreas aledañas a sus centros de trabajo”.
Los delegados fraternos de la Liga Comunista en Canadá y del Partido Socialista de los Trabajadores en Estados Unidos que participaron en el congreso enriquecieron la discusión con informes sobre las experiencias de las fracciones sindicales de sus partidos.
“A medida que la Liga realice este curso, algunos miembros cambiarán de trabajo, otros se mudarán para vivir más cerca de donde trabajan”, dijo Silberman.
“Nuestro trabajo no consiste en explicar lo mal que están las cosas. Tampoco es nuestra meta mofarnos de los problemas de la clase capitalista y sus políticos. La mayoría de los trabajadores ya saben estas cosas”, dijo. “Abordamos la crisis que enfrenta nuestra clase, nuestra necesidad de romper con la imagen que tenemos de nosotros mismos que nos imponen los gobernantes y comenzar a reconocer que podemos tomar el poder y organizar la sociedad.
“Un aspecto fundamental para lograr esto es la defensa de la revolución socialista en Cuba, el mejor ejemplo vivo de lo que los trabajadores son capaces de lograr cuando llegamos a comprender que nuestra condición nunca cambiará mientras sigamos atrapados en el engaño de la política capitalista, y emprendamos una línea de marcha revolucionaria hacia la toma del poder”, dijo. Una de las principales actividades de la Liga será fomentar en el Reino Unido la participación en la Brigada Primero de Mayo a Cuba.
“Los cambios en la clase trabajadora cobraron expresión electoral en el referéndum sobre el Brexit en junio de 2016, y de nuevo en las elecciones generales de 2017. Pero por quién votaron no determina si hablamos con ellos”, dijo Silberman. “No hay nada para los trabajadores en las diferencias políticas capitalistas sobre el Brexit. La primera ministra Theresa May solía decir: ‘ningún acuerdo es mejor que un mal acuerdo’. Ahora su gobierno habla de un ‘alineamiento estructural’ con la Unión Europea.
“Esto es un reflejo del temor de los gobernantes de que lo nuevo supere cada vez más su odio hacia lo viejo”, dijo. “Esto es cierto para los capitalistas rivales en Alemania y Francia, así como en el Reino Unido. Nuestro curso no es elegir entre las alas de los partidos capitalistas, sino apuntar hacia la acción política independiente por la clase trabajadora. Nos dirigimos de manera amplia a la clase trabajadora en su conjunto”.
Silberman dijo que con el fin de expandir el alcance en la clase trabajadora, la Liga postulará candidatos para las elecciones locales del 3 de mayo en Londres y Manchester.
“Nos enfrentaremos a todos los adversarios, incluyendo al Partido Laborista encabezado por Jeremy Corbyn, el cual apela al estado capitalista como su protector y benefactor”, dijo. “Si bien ellos ven a la clase obrera como un problema que tiene que ser manipulado socialmente, nosotros vemos a los trabajadores como la solución”.
Debate enriquece curso de Liga
Dag Tirsén informó en la discusión sobre cómo la rama de la Liga en Manchester había respondido al ataque incendiario de una mezquita en Newton Heath. “Los grupos de izquierda veían a este distrito obrero como territorio enemigo”, dijo Tirsén. “Fuimos de puerta en puerta explicando que está en los intereses de los trabajadores el oponerse a estos ataques. Vendimos muchas suscripciones al Militante y libros de dirigentes comunistas en este proceso”.
Ólof Andra Proppé informó sobre cómo la rama de Londres interactuó con los trabajadores que participaron en una marcha convocada por la Football Lads Alliance, un grupo que plantea demandas reaccionarias al gobierno a que actúe contra el terrorismo islamista y el “extremismo”. “Encontramos que entre los manifestantes —tachados de ‘escoria racista’ por oponentes de la marcha— habían trabajadores que buscaban una solución a la crisis y estaban abiertos a discutir con los miembros de la Liga y comprar literatura comunista”, dijo Proppé.
En un evento público celebrado por la noche el dirigente de la Liga Comunista Pete Clifford habló sobre el “desgarrador” acto conmemorativo para las 71 víctimas del incendio en la Torre Grenfell, realizado dos días antes y al que asistieron miembros de la familia real británica, Theresa May, Jeremy Corbyn y otros. “Seis meses después del incendio, solo 42 de las 209 familias que quedaron sin hogar tienen nuevas viviendas permanentes”, dijo Clifford. “Es otro ejemplo de cómo los gobernantes no tienen ninguna solución a la crisis excepto que los trabajadores sean los paguen por la crisis”.
Clifford explicó que la Liga había hecho campaña con propuestas proletarias para responder a la catástrofe social. “Debemos unirnos a los sobrevivientes de la Torre Grenfell en su lucha para que sean reubicados en el área de inmediato en viviendas de buena calidad y para que reciban compensación”, dijo. Clifford citó la declaración pública de la Liga con la que sus miembros hicieron campaña después del mortal incendio. “Los sindicatos deberían participar en una campaña masiva —trabajando conjuntamente con los inquilinos por todo el país— para exigir el desmantelamiento inmediato de los revestimientos defectuosos, la instalación de rociadores y otras medidas de protección en todo el país”.
“Se aferran a los vestigios de la ‘relación especial’ con Estados Unidos’, dijo Clifford, señalando cómo la crisis política de los gobernantes en el Reino Unido se intensifica debido a la disminución relativa del poder de Londres en el orden jerárquico del imperialismo mundial. “Mucho dijeron en la prensa del distanciamiento de Theresa May del presidente Trump respecto a su declaración sobre Jerusalén. Pero en realidad ella enfatizó el apoyo del gobierno a lo que Trump está haciendo en el Medio Oriente”.
Junto a Clifford también hablaron en el evento Patrick Tremblay, de la Liga Comunista en Canadá y Steve Clark y Bea Stanswick, del Partido Socialista de los Trabajadores en Estados Unidos.
“Me quedé atónito de lo similar que son las condiciones en el Reino Unido, Estados Unidos y Canadá, y también del trabajo del movimiento comunista en los tres países”, dijo Sajda Begum al Militante después de escuchar las presentaciones. “Me dio una idea más clara”.