Alyson Kennedy, candidata del Partido Socialista de los Trabajadores para presidente en 2020, emitió la siguiente declaración el 6 de mayo. Malcolm Jarrett es el candidato del partido a la vicepresidencia.
Los trabajadores están encontrando maneras para unirse y luchar contra los ataques de los gobernantes contra nuestros trabajos, salarios y condiciones laborales. Camioneros propietarios-operadores protestaron el 1 de mayo en Los Angeles, Chicago y Washington, para exigir que se elimine el uso de agentes intermediarios que sacan máximo provecho y destruyen las vidas de los camioneros. Trabajadores de Walmart y de otras tiendas están luchando contra la aceleración del trabajo, cambios de horario arbitrarios y condiciones de trabajo peligrosas. Trabajadores por todo el mundo están haciendo lo mismo.
Miembros del Partido Socialista de los Trabajadores que trabajan en Walmart, en los ferrocarriles y en otros lugares son parte de estas luchas. Al centro de esto está la necesidad de que los trabajadores luchen por tener mayor control sobre todos los aspectos de la producción.
También enfrentamos crecientes ataques contra nuestros derechos. El alcalde de Nueva York, Bill de Blasio, ha amenazado con utilizar a la policía para suprimir las protestas —y lo está haciendo. E intenta dividir al pueblo trabajador y desviar nuestra atención del desastre del sistema de “salud” capitalista impulsado por el lucro usando a los judíos como chivos expiatorios culpándolos por la propagación del virus.
Millones de trabajadores hemos sido despedidos, más de 30 millones en las últimas seis semanas. Y esto según las cifras “oficiales”, que no cuentan a los trabajadores temporales o con contratos, y a los que no tienen documentos y muchos otros que trabajan fuera de la nómina.
Los trabajadores necesitan estar en el trabajo para sumarse a luchas contra los ataques de los patrones. Los trabajadores atrapados en sus hogares enfrentan cada vez más un desastre económico, la atomización social y la desmoralización.
Mi campaña insta a los trabajadores a organizarse para luchar por:
- Un programa masivo de obras públicas financiado por el gobierno para poner a trabajar a millones de personas con salarios de escala sindical para construir hospitales, escuelas, viviendas asequibles y otras cosas que necesitamos con urgencia. El lograr que más de nosotros estemos trabajando ahora debilita la capacidad de los patrones de poner a los desempleados en contra de los empleados y empeorar así las condiciones de todos los trabajadores.
- También luchamos por la amnistía para los trabajadores indocumentados para evitar que los patrones utilicen la amenaza de la deportación contra los inmigrantes para reducir los salarios y las condiciones de trabajo de toda la clase trabajadora.
Los patrones usan su monopolio sobre la producción para construir productos con una “obsolescencia planificada” incorporada, con un total desprecio a la seguridad de los trabajadores o de los que compran sus productos de mala calidad. Lo hacen con una moralidad definida por el afán de maximizar sus ganancias a expensas de los que trabajan por su sustento.
- El PST explica que los trabajadores deben luchar para arrebatar más control de la producción de manos de los patrones. Esa lucha requiere la creación de comités de todos los trabajadores en las fábricas y otros centros laborales, y de los consumidores que tienen un interés real en este esfuerzo. Estos comités pueden luchar para sacar a la luz como los patrones manipulan sus libros de contabilidad y como organizan nuestra explotación. Como respondió un trabajador despedido de Debenhams, Irlanda, a las quejas de los patrones sobre sus deudas: “Necesitamos ver sus libros”.
- A medida que los trabajadores toman control de la producción, aprendemos que solo nuestra clase es capaz de decidir las prioridades y dirigir la sociedad a favor de las necesidades humanas. El control obrero es una escuela para la toma del poder político en nuestras manos.
- Los trabajadores deben romper con los dos partidos de los patrones, los demócratas y los republicanos. Necesitamos nuestro propio partido político, un partido obrero basado en los sindicatos, que dé voz a todas las luchas que los trabajadores y nuestros aliados libramos hoy. Un partido obrero aumentaría nuestra disposición para las luchas que se avecinan y para liderar la lucha para que los trabajadores y los agricultores tomemos el poder político en nuestras manos.
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